Sin margen para lamentarse, el ICG Força Lleida ha devuelto este lunes a los entrenamientos sabiendo que en apenas 48 horas les llega una nueva prueba de alto nivel. Será en el primer partido del año en casa, en el Espai Fruita, y con un rival que la pasada temporada flirteó con el ascenso casi hasta el final. El HLA Alicante, un conjunto que este curso también aspira a todo, será un obstáculo de gran calibre para un equipo, el leridano, que seguirá sin poder contar con Juani Marcos y que tiene la seria duda de Marc Hughes, lesionado ayer en Madrid. “Tiene un fuerte esguince en el tobillo, y es complicado que pueda jugar”, explicaba resignado el técnico Gerard Encuentra que lamentaba el hecho de que “si ya íbamos un poco justitos, con esta baja nos quedamos con pocos efectivos. Pero no poder hacer nada”.
Lucentum, por su parte, jugó su partido el viernes y sin duda habrá podido recuperarse mejor, y éste puede ser otro factor de desequilibrio. Por tanto, el primer objetivo ahora es “recuperarnos bien del desgaste, sabiendo que el domingo tenemos otro partido”. Crearle dificultades al conjunto alicantino depende de hacer muy bien las cosas y minimizar los errores, pero existe otro factor que Encuentra considera que puede ser determinante; la afición. “En casa tenemos que hacernos fuertes., y con la afición lo somos más. Yo lo he vivido como aficionado, desde la grada, y cuando la gente empuja al equipo lo nota mucho. Sobre todo en los momentos complicados. Somos un equipo muy joven y los necesitamos”.
El partido ante el HLA Alicante se disputará este miércoles en el Espai Fruita a partir de las 20.00 horas.
